La localización y determinación de los factores de peligrosidad es un aspecto fundamental para comprender y anticipar los fenómenos naturales que pueden derivar en desastres. Estos factores se relacionan con el nivel de riesgo, los posibles daños y la magnitud de las amenazas, que en época de lluvias suelen materializarse en deslizamientos e inundaciones provocados por procesos de moderación hidrológica o fallas geológicas. Dichos eventos ocasionan pérdidas significativas en vidas humanas y animales, así como en infraestructura y bienes materiales.

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Con el fin de prevenir tales consecuencias, resulta indispensable llevar a cabo una evaluación integral de vulnerabilidad y peligrosidad mediante la Metodología del Sistema de Riesgo Natural (MSRN) de fenómenos naturales. Este sistema permite analizar y anticipar:

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• Movimientos de tierra e inundaciones.

• Localización de fallas geológicas.

• Marcación de cráteres subterráneos de agua.

• Procesos de colapso gradual del terreno.

• Identificación de boquillas de lodo.

• Variaciones en la napa freática.

• Desprendimientos subterráneos de sedimentos y tierra.

En las zonas altas y medias de montañas, senderos y microcuencas hidrográficas, los movimientos de masa se ven directamente influenciados por fenómenos hidrológicos y geológicos debido a la combinación de altas pendientes y suelos saturados. Esto convierte a dichas áreas en regiones altamente vulnerables, con amenazas constantes de inundaciones y deslizamientos.

Ante esta realidad, la Organización Internacional Granjas Integrales Productivas Autosostenibles (OI-GIPAS) ha implementado en diferentes regiones del mundo el Sistema de Acción Ambiental contra Fenómenos de la Naturaleza (SAFENA), el cual integra acciones específicas frente a fenómenos hidrológicos y geológicos. Este sistema constituye una herramienta científica y operativa para fortalecer la prevención, la mitigación y la resiliencia de las comunidades expuestas a riesgos naturales.